Hace unas semanas, durante una mañana gris y con mucho aire, venían a visitarnos Jenni, Antonio y el pequeño Oriol, para darle un poco de color al día.
Dentro de poco, Oriol cumplirá su primer añito y sus papás darán el "SI QUIERO", así que, antes de que llegue ese increíble día, hemos hecho una sesión pre boda familiar para guardar un bonito recuerdo.
La lluvia nos dio tregua, el aire lo intento, y Oriol se portó como un campeón. No paró de echarme sonrisas y sin quitarme ojo en ningún momento, hemos conseguido fotos fantásticas.
Entre Antonio y Jenni veréis pura complicidad y mucha naturalidad, pero sobre todo, mucho amor por su peque.